
El aspirante a congresista por la Provincia de La Romana Licenciado Leoncio Amé Demes, dictó una charla sobre los Diez Mandamientos de la Ley de Dios. La disertación se efectuó durante un culto de avivamiento celebrado en La Iglesia de La Profecía en la ciudad de La Romana, esta charla es parte de una serie de disertaciones que el aspirante a legislador de la República del PRD por la Provincia de La Romana tiene programado para exponer a los fieles de las Iglesias Cristianas con su visión política sobre uno de los preceptos éticos y morales más trascendente de la historia antigua que ha tenido mayor incidencia y permanencia en la conformación de los valores que integran la moral Cristiana por la cual se rige nuestra sociedad, según informó la asistente ejecutiva del político romanense.
En la exposición de algunos de los puntos de su visión sobre el tema, el Lic. Leoncio Amé Demes expresó que los Diez Mandamientos, ahora frente a la involución de valores que afecta nuestra sociedad deben adquirir mayor vigencia para con ellos promover el rescate de nuestros verdaderos valores.
Al finalizar sus palabras, puntualizó, que: “los diez mandamientos para que tengan alguna utilidad en nuestras vidas, debemos meditar en ellos y permitir que sean grabados en nuestras almas por el dedo de Dios, tal como aconteció en las tablas de piedra hace miles de años en el Monte Sinai."
Continuó diciendo que: "Que según la interpretación que el mismo Jesús hizo de los diez mandamientos, inferimos que, si amamos a Dios, y a nuestro prójimo como a sí mismo, cumplimos con la ley divina preceptuada en los diez mandamientos. (De estos dos preceptos depende toda la ley). En eso debe consistir la real política y debería ser la visión colectiva de todos los verdaderos políticos. Si los gobiernos de las Naciones son encabezados por hombres y mujeres con suficiente temor de Dios para cumplir los diez mandamientos resumidos en los dos puntos establecidos por el señor Jesús, según refiere la Biblia en Mateo 22: 37-40, entonces, la sociedades retomarán con todo su vigor los principios y valores establecidos por Dios, en el Monte Sinai desde hace ya mas de 3000 años, y luego seremos mejores ciudadanos.”
Más adelante, el Licenciado Amé exhortó a la Iglesia diciendo:
“Por eso, el Pueblo Cristiano, debe tener en cuenta que, al momento de ejercer sus deberes ciudadanos de elegir, escoger a las personas que puedan conducir a retomar los valores de la fe cristiana, sin los cuales ninguna sociedad podría ser conducida a puerto seguro y transparente.”
En la exposición de algunos de los puntos de su visión sobre el tema, el Lic. Leoncio Amé Demes expresó que los Diez Mandamientos, ahora frente a la involución de valores que afecta nuestra sociedad deben adquirir mayor vigencia para con ellos promover el rescate de nuestros verdaderos valores.
Al finalizar sus palabras, puntualizó, que: “los diez mandamientos para que tengan alguna utilidad en nuestras vidas, debemos meditar en ellos y permitir que sean grabados en nuestras almas por el dedo de Dios, tal como aconteció en las tablas de piedra hace miles de años en el Monte Sinai."
Continuó diciendo que: "Que según la interpretación que el mismo Jesús hizo de los diez mandamientos, inferimos que, si amamos a Dios, y a nuestro prójimo como a sí mismo, cumplimos con la ley divina preceptuada en los diez mandamientos. (De estos dos preceptos depende toda la ley). En eso debe consistir la real política y debería ser la visión colectiva de todos los verdaderos políticos. Si los gobiernos de las Naciones son encabezados por hombres y mujeres con suficiente temor de Dios para cumplir los diez mandamientos resumidos en los dos puntos establecidos por el señor Jesús, según refiere la Biblia en Mateo 22: 37-40, entonces, la sociedades retomarán con todo su vigor los principios y valores establecidos por Dios, en el Monte Sinai desde hace ya mas de 3000 años, y luego seremos mejores ciudadanos.”
Más adelante, el Licenciado Amé exhortó a la Iglesia diciendo:
“Por eso, el Pueblo Cristiano, debe tener en cuenta que, al momento de ejercer sus deberes ciudadanos de elegir, escoger a las personas que puedan conducir a retomar los valores de la fe cristiana, sin los cuales ninguna sociedad podría ser conducida a puerto seguro y transparente.”